Las bajas temperaturas de los últimos días nos están dejando una estampa propia del invierno, y es que la mayoría de vehículos de la calle amanecen por la mañana temprano con una gran cantidad de hielo tanto en los cristales como en el resto de las partes de su carrocería.
Antes de ponernos a conducir, es preciso dedicar unos minutos a retirar con cuidado la gruesa capa de hielo presente en los cristales del vehículo. Para que lo hagas bien y sin dañar el cristal, aquí tienes una serie de trucos elaborados por la DGT, organismo que ha contado a su vez con la colaboración de CarGlass, empresa especialista en el tratamiento y en la sustitución de los cristales de los automóviles.
QUITAR EL HIELO DEL CRISTAL DEL COCHE: LO QUE NUNCA DEBES HACER
En primer lugar, nunca se debe accionar la calefacción del vehículo a una temperatura excesivamente elevada. Tampoco debes echar sobre el cristal agua muy caliente. Por ambos motivos, debido al brusco cambio de temperatura, el cristal del parabrisas se puede llegar a romper.
Según las diversas pruebas realizadas al respecto, con una temperatura exterior de -10 grados y si enciendes la calefacción muy fuerte, el cristal del vehículo se puede romper pasados los 5 minutos en más del 80% de las ocasiones. Con -5 grados de temparatua, puede suceder en el 70% de las veces. Y a 0 grados, llega a casi el 60%.
En segundo lugar, tampoco se debe accionar los limpiaparabrisas sin haber retirado previamente la capa de hielo del cristal, ya que la goma o el material específico de las escobillas se pueden dañar (romper, rajar, resquebrajar parcialmente…).
LOS TRUCOS QUE SÍ FUNCIONAN ANTE EL HIELO DE LOS CRISTALES DEL COCHE
Si tienes pensado aparcar tu coche al aire libre y quieres evitar que amanezca con la correspondiente capa de hielo, el mejor truco es colocar un cartón de grandes dimensiones que trate de ocupar casi toda la superficie del parabrisas delantero. Este cartón lo puedes dejar sujeto con el limpiaparabrisas (hay muchos conductores que también colocan otro cartón sobre la luneta posterior).
Para quitar el hielo, la herramienta más recomendable es usar una rasqueta de plástico, un objeto muy común que se vende en las diferentes tiendas de accesorios para el automóvil. Esta rasqueta actúa con eficacia sin dañar el cristal, además de tener un precio normalmente muy barato. Además, por su pequeño tamaño, se puede guardar en la guantera del vehículo o en algún otro de los huecos portaobjetos que pueda haber en el habitáculo.
En el caso del alcohol, tanto su composición química como la propia experiencia han demostrado que ayuda mucho a derretir con cierta facilidad el hielo de los cristales.